Trucos para ayudar a los niños a mejorar su dibujo

Trucos para ayudar a los niños a mejorar su dibujo

Temiendo inhibir su creatividad, tendemos a evitar enseñar a los niños a dibujar. Pero están recibiendo estímulos externos todo el tiempo y muchos quieren aprender a dibujar. ¿Por qué dejarlos solos cuando podemos ayudarles a mejorar su forma de dibujar?



Etapas del desarrollo: ¿Debemos interferir?

¿Cómo nos enfrentamos con la forma de enseñar a dibujar a los niños? Depende de la etapa de desarrollo en la que se encuentren y, por supuesto, cada niño es diferente.



· Un primer lenguaje visual: el de los libros ilustrados, los niños pequeños aprenden que las formas tienen nombres y representan objetos. Comienzan a etiquetar formas familiares que se encuentran en sus garabatos, y luego comienzan a usar formas simples para construir objetos sencillos, especialmente caras.



· El sistema visual se expande: a medida que los niños crecen, añaden detalles y complejidad a sus dibujos. Las caras ahora se unen a los cuerpos y encuentran formas de representar más objetos. Alrededor de los 5 años, dependiendo del niño, surge una sensación de patrón, con casas, árboles y familias contando historias cercanas.



· Descubrir limitaciones: los problemas comienzan sobre la edad de 10 años cuando la realidad y las apariencias se vuelven importantes. El lanzamiento del cohete, el hermoso vestido o el caballo no se ven lo suficientemente bien, el lenguaje simbólico ya no funciona. Algunos niños se pueden obsesionar con dibujar detalles en esta etapa.





Los dibujos representan la experiencia del mundo del niño. Debemos tener cuidado de no invalidarlo por la forma en la que los comentamos. Como por ejemplo:

· Imponer nuestras propias narraciones, nuestras historias o ideas, en el dibujo, por ejemplo, "Oh, eso es un perro muy bonito. ¿O es un caballo? Bueno, parece un perro...".

· Crítica a la falta de realismo.



Es importante recordar que si a los niños no se les enseña a dibujar, su creatividad morirá de forma natural. Las habilidades artísticas (dibujar, pintar, esculpir…) pueden y deben enseñarse a los niños. Antes de poder romper las reglas, debes conocerlas: seguro que nadie sugeriría que puedes tocar buena música sin haber estado años estudiando. Sin embargo, extrañamente no se aplica la misma lógica al dibujo.





¿Cómo ayudar a un niño a aprender a dibujar?

Aprender a dibujar es mucho más sobre aprender a ver que sobre hacer líneas en un papel. Algo esencial es que para poder enseñar a tu hijo a ver de esta manera, primero debes aprenderlo tú mismo.



  • · Toma algunas lecciones para principiantes o asiste a alguna clase de dibujo en el centro de arte más cercano.
  • · Lee “Aprender a dibujar con el lado derecho del cerebro" de Betty Edward.



Debes comprender cómo un artista ve el mundo para fomentar esta visión en tu hijo. No esperes resultados instantáneos. El proceso de aprender a dibujar es largo y a menudo se mide en años, dependiendo de las habilidades motoras finas y el desarrollo cognitivo del niño. Presionarlo solo producirá infelicidad para todos los involucrados. Avanzar poco a poco permitirá que su talento natural florezca.



Aprende a escuchar y siempre sé positivo. Ofrece posibilidades y sugerencias en lugar de imponer reglas. Déjate guiar por su interés y capacidad. Cuando un niño está feliz con sus esfuerzos, comparte su alegría. Si el niño siente que el dibujo no está muy bien, habla con él sobre los objetivos que quiere conseguir, encuentra cosas positivas para elogiar y cosas para aprender.





Aprende sobre el arte con tus hijos

Los niños aprenden a dibujar de la misma manera que aprenden a hablar (y luego a escribir), copiando. Los símbolos que usamos para las ideas, ya sean sonidos, signos escritos o pictóricos, son generalmente aprendidos. Dibujar con los niños les ayuda a descubrir que las formas pueden tener un significado, y lo que es más importante, que ellos mismos pueden crear formas significativas.





Niños pequeños: dibujo modelo

Dibujar con bebés y niños pequeños es muy divertido. Comienza con formas simples y nómbralas. Dibuja caras sencillas. Mientras lo haces, explícale lo que estás haciendo: una sonrisa feliz, una cara triste, pelo rizado… Puedes dibujar árboles, flores, césped, una casa, animales.



Anima a los pequeños a unirse, a que hagan sus dibujos o que añadan detalles. Vete nombrando los colores que vais utilizando.





Niños en edad preescolar: expandiendo el vocabulario

Puedes ampliar el vocabulario de los símbolos visuales de tu hijo al igual que con la palabra escrita, 'leyéndolos' y 'escribiéndolos'.

Cuando empiece a dibujar, pregúntale a tu hijo qué es lo que está representando. Puedes ofrecer indicaciones suaves a medida que avanza, pero no seas insistente, simplemente ofrece posibilidades. Un caballo…, ¿cuántas patas tiene?, ¿cuatro?, ¿quién monta el caballo?, ¿tiene silla de montar?

Puedes ofrecer una sugerencia para una línea que ayude a representar una forma desconocida. ¿Cómo dibujo una silla de montar?, ¿tal vez una línea curva, como esta?, ¿cómo podemos mostrar movimiento? Intenta hacer trazos rápidos, energéticos. Trazos lentos y ondulados para el agua, por ejemplo. Recuerda que el arte se trata de sentir y de ver.

Cuando pasas algo de tiempo dibujando con tu hijo, haciendo dibujos sobre tu vida (lo que haces en el trabajo, una visita al supermercado, un viaje especial, cómo se sintió acerca de algo importante…) estás modelando la elaboración del dibujo y su valor como medio de expresión.





Edad escolar: listo para desarrollar habilidades

Cuando un niño comienza a interesarse en crear imágenes complejas, tiene buen control de la motricidad fina y expresa el deseo de dibujar cómo se ven las cosas, entonces es cuando estará listo para comenzar a aprender a dibujar de manera realista.

Hay que recordar que el realismo es solo un aspecto de la expresión artística. Los esfuerzos en esta área deben equilibrarse fomentando la creación expresiva, la experimentación con el color y la exposición al arte no figurativo.

Utiliza tutoriales y libros de dibujo para hacer ejercicios prácticos, pero sin dejar que sean divertidos. No olvides centrarte en sus intereses (caballos, personajes de dibujos animados, hadas…) en lugar de ejercicios estándar impersonales que no le llamen la atención.



Esperamos que todos estos consejos te ayuden a perder el miedo y puedas ayudar a tus hijos a mejorar en una faceta muy importante en el desarrollo de su creatividad, el dibujo. Recuerda que en nuestra web tienes gran variedad de material para empezar cuanto antes a dibujar con los niños.

Ya sabes, solo tienes que proponértelo y ¡manos al bloc de dibujo!

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